21 junio, 2011

La agresión en la infancia (2da Parte)


En esta segunda parte  de la nota, La agresividad en los niños, quiero centrarme en cómo los padres pueden  prevenir las conductas agresivas de sus hijos,  lo que  a largo plazo los puede ayudar a tener una adolescencia con menos problemas y más adaptativa.

Como mencioné en la nota anterior, la conducta agresiva puede verse influenciada por varios factores (biológicos, familiares, temperamentales etc.). En esta nota me centraré en los aspectos familiares, específicamente en  los estilos de crianza.  Hay estudios que han demostrado  que los estilos de crianza excesivamente autoritarios o por el contrario excesivamente permisivos, favorecen la aparición de conductas agresivas en el niño. Concretamente, la falta de apoyo y de afecto, el uso del castigo para controlar la conducta del niño, la falta de supervisión y comunicación y sobre todo una  disciplinainconsistente se asocian con conductas más agresivas.  De forma opusesta, un estilo de crianza  caracterizado por altos niveles de apoyo, supervisión, comunicación  y flexibilidad actúa como factor protector de la conducta agresiva.

Uno de los aspectos importantes a considerar en la crianza es el establecimiento de los límites. La evidencia señala que la consistencia en la aplicación de éstos y acompañado de una explicación de las razones para cumplirlos  por parte de los hijos se asocian con niños menos agresivos. Por el contrario, cuando se establecen los límites de forma agresiva (física y verbalmente) acompañada por un bajo nivel de razonamiento, en donde no se escucha el planteamiento de los hijos, no se explica y solo se impone la norma, generan más conductas agresivas en los hijos comparada con una  disciplina menos agresiva.


Como prevenir
Lactantes (0-1 año):
  • Aprender a leer las señales del bebé.
  • Los bebes se sienten seguros y amados cuando se responde  adecuadamente a su  llanto y a sus necesidades.
  • Entregar estimulación física, visual y táctil. (Cuidado con la sobre estimulación)
  • Poner sus casas a prueba de niños.
  • Tener redes de apoyo para cuando se sientan cansados o estresados y sientan que pueden agredir al bebé.

En los infantes y preescolares.
  • Destinar tiempo para el juego ya que este promueve relaciones positivas.
  • Estimular el desarrollo del lenguaje. 
  • Estimular el desarrollo de las competencias sociales y emocionales.
  • Premiar la buena conducta dando atención, estímulos y palabras de refuerzo.
  • Manejar adecuadamente las separaciones.
  • Enseñar a los niños a calmarse cuando tengan pena, rabia,  ayudando a su verbalización a trravés del etiquetado de sus emociones.
  • Tener expectativas realistas de la conducta de sus hijos (de acuerdo a la edad de cada niño).
  • Cuando los pequeños tengan conductas agresivas, guíalo en la resolución del conflicto siendo coherente, calmado y no punitivo. Recuerda que eres su principal modelo.
  • Mantén rutinas que resulten predecibles para el niño.
  • Estimular la resolución de conflicto.

Se  debe tener cuidado con  etiquetar a los niños de "agresivos"  ya que como mencioné, es en la infancia temprana cuando más se dan las conductas agresivas y cuando se aprende a controlarlas. Desde esta perspectiva, se debería tener en cuenta que ciertas conductas agresivas corresponden al desarrollo esperado de los niños. Sin embargo como padres habría que buscar ayuda cuando los niños reiteradamente: tienden a hacer daño a otros (ya sea física y/o emocionalmente), cuando rompen las cosas de los demás y también cuando presentan agresiones verbales donde  insultan, critican, amenazan, discuten o culpan a otros. Todas estas,  son expresiones inadecuadas de agresión que requieren de atención por parte de los padres o de los cuidadores.

Carolina González E.
Psicóloga.
Diplomada en Apego y Teorías Actuales Del Desarrollo.
UDD 



14 junio, 2011

¿Sabías que?

¿Entre el 10% y el 36% de los niños entre 0 y 2 años, presentan algún tipo de trastorno? Las principales dificultades que presentan, se relacionan con problemas de sueño (40%), llanto excesivo (22%), dificultades en la alimentación (22%) e hipersensibilidad (7,3%). Lamentablemente solo entre el 40% y el 60% de estas dificultades remiten sin necesitar ayuda especializada, resultando en alguna dificultad más adelante.
                                                

01 junio, 2011

La agresión en la infancia (1era Parte)


Con las noticias sobre bullying que vemos en televisión, se hace necesario conocer más sobre la naturaleza de las conductas agresivas en los niños. Muchas veces los padres piensan como prevenir el bullying por ejemplo, en niños tímidos, pero en esta oportunidad me parece importante poner el énfasis en niños que presentan conductas agresivas y que pueden ser potenciales agresores. En esta primera parte  presentaré información relevante sobre la agresión y en una segunda parte algunas sugerencias y formas de prevenir los problemas asociados a la agresión en los  lactantes y preescolares.

 En los últimos años las investigaciones asociadas a la agresión han desmitificado algunas creencias asociadas a las conductas agresivas. Por ejemplo, se cree que el pick de la conducta agresiva es en la adolescencia, sin embargo este se presenta entre los  2 y 3 años y luego disminuye de forma constante hasta llegar a la adolescencia. También se creía que los niños aprenden a ser físicamente agresivos, pero el desarrollo de la agresión en la infancia esta dado por múltiples factores incluso desde la vida prenatal. El uso de sustancias  por parte de la madre durante el embarazo, el estrés y variados factores fisiológicos están asociados al riesgo de presentar conductas más agresivas que el promedio. También existen otros factores como por ejemplo estilos de crianza, embarazo adolescente y/o bajo nivel socioeconómico.
Algunos datos relevantes:
  • La agresión física se presenta más en niños que en niñas. Esto  podría deberse a  la mayor fluidez verbal que poseen las niñas lo que las ayuda a resolver los conflictos de mejor manera.  
  • Los niños que muestran elevadas conductas agresivas en la primera infancia, entre los 1.5 y 2 años, también tienen conductas agresivas en la edad escolar. 
  • Las conductas de agresión física en niños mayores de tres años predicen el desarrollo de actos delictuales violentos, el abuso de drogas durante la adolescencia, además de los índices de depresión y de deserción escolar.



Finalmente, hay que tener en consideración que así como en el periodo preescolar se presenta el pick de las conductas agresivas, también es el momento en que los niños aprenden alternativas al uso de la agresión física, por lo que resulta importante que los padres fomenten el comportamiento prosocial y que estén atentos a evaluar la conducta agresiva de los niños buscando ayuda para el manejo de esta dificultad con el fin de prevenir el riesgo de manifestar comportamientos agresivos crónicos más adelante.

La agresión en la infancia (1era Parte)


Con las noticias sobre bullying que vemos en televisión, se hace necesario conocer más sobre la naturaleza de las conductas agresivas en los niños. Muchas veces los padres piensan como prevenir el bullying por ejemplo, en niños tímidos, pero en esta oportunidad me parece importante poner el énfasis en niños que presentan conductas agresivas y que pueden ser potenciales agresores. En esta primera parte  presentaré información relevante sobre la agresión y en una segunda parte algunas sugerencias y formas de prevenir los problemas asociados a la agresión en los  lactantes y preescolares.

 En los últimos años las investigaciones asociadas a la agresión han desmitificado algunas creencias asociadas a las conductas agresivas. Por ejemplo, se cree que el pick de la conducta agresiva es en la adolescencia, sin embargo este se presenta entre los  2 y 3 años y luego disminuye de forma constante hasta llegar a la adolescencia. También se creía que los niños aprenden a ser físicamente agresivos, pero el desarrollo de la agresión en la infancia esta dado por múltiples factores incluso desde la vida prenatal. El uso de sustancias  por parte de la madre durante el embarazo, el estrés y variados factores fisiológicos están asociados al riesgo de presentar conductas más agresivas que el promedio. También existen otros factores como por ejemplo estilos de crianza, embarazo adolescente y/o bajo nivel socioeconómico.
Algunos datos relevantes:
  • La agresión física se presenta más en niños que en niñas. Esto  podría deberse a  la mayor fluidez verbal que poseen las niñas lo que las ayuda a resolver los conflictos de mejor manera.  
  • Los niños que muestran elevadas conductas agresivas en la primera infancia, entre los 1.5 y 2 años, también tienen conductas agresivas en la edad escolar. 
  • Las conductas de agresión física en niños mayores de tres años predicen el desarrollo de actos delictuales violentos, el abuso de drogas durante la adolescencia, además de los índices de depresión y de deserción escolar.

Finalmente, hay que tener en consideración que así como en el periodo preescolar se presenta el pick de las conductas agresivas, también es el momento en que los niños aprenden alternativas al uso de la agresión física, por lo que resulta importante que los padres fomenten el comportamiento prosocial y que estén atentos a evaluar la conducta agresiva de los niños buscando ayuda para el manejo de esta dificultad con el fin de prevenir el riesgo de manifestar comportamientos agresivos crónicos más adelante.